domingo, agosto 20, 2006

Sin cataforesis!


el lunes pasado empezaron las clases otra vez y todo sucedio en el mas pacifico orden. lo que perfilaba como un caos el domingo a la noche, termino siendo un prolijo y aceitado lunes. el sr. c partio a new york esa madrugada muy temprano.
asi partimos los tres hacia la escuela, (si, aca el colegio es la escuela, los chicos son los ninios, las clases son aulas y asi son innumerables palabras que nos eran prohibidas en nuestro lexico cotidiano cuando eramos chicos o mejor dicho, pequenios.) llegamos a tiempo con la tipica excitación del primer dia de clase y las mochilas pesadas, llenas de cuadernos en blanco, gomas impolutas, cartucheras nuevas y promesas. promesas de que este anio que comienza estudiare y no me llevare ninguna materia.... no, perdon, esa era yo... mis hijos estan en el cuadro de honor y probablemente solo esten pensando en sus nuevos utiles y preguntandose con quien se sentaran. Hmmm.
deje a la srta s en su clase, quien me pidio que la salude en a puerta sin muchas fanfarrias y alli parti a dejar a mi bebe en su nueva clase de segundo grado. por suerte las maestras son las mismas que tuvo la srta s. si esperan otro dosil y paciente integrante de la familia c, estan fritas! ahi les deje el mas energetico y que tiene la cabeza dura y la paciencia corta de la madre. el si me dejo entrar, acompaniarlo hasta su mesa y darle 1 (lease un) solo beso. ahí quedo contento sentado y charlando con sus amigos. y me fui. me fui saludando por los pasillos del nuevo edificio a padres, maestros, directores, etc. con una sonrisa y agitando la manito como si estuviera sobre un carroza del corzo de boulogne. al que nos llevaba la abuela keka cuando eramos chicos. la realidad es que tenia un enorme nudo en el estomago. es tan grande el nuevo edificio. grande, solido y como mis hijos, se sostiene solo, erguido, magnifico. no me necesitan. asi abrumada me subi al auto, arranque y llore. llore con ganas. hubiera querido volver y sentarme con ellos. no, mejor me los hubiera llevado a casa para seguir empollandolos.
la verdad me golpeo a la tarde cuando los pase a buscar y cargue dos mochilas y dos lunch boxes. ellos me seguian, arrastrano sus pies, transpirados, arrebolados por el calor y famelicos. solo tienen siete y nueve. Ahí cai en cuenta de que 'todavia tengo un largo camino por recorrer muchacha’.
que me pasa? es la crisis de los 40 o es que gran parte de ser madre es sufrir? alguna vez le pregunte a mi mama inocentemente: ‘cuando empezas a dormir toda la noche?’ y ella me contesto sabiamente: ‘nunca’.
mientras manejaba hacia el muy querido e inefable consulado argentino, me di cuenta de que soy un modelo ’67, sin cataforesis, palanca la piso, sin levanta vidrios electrico y frenos a disco. probablemente una rural falcon. confiable, dura, pero sin cataforesis.
ahí se fue la primer semana de clases. en agosto? todavia no me cae la ficha. porque empieza el anio en la mitad? por la misma razon que cuando abris la canilla marcada con la letra C sale agua fria!
saludos y nos estamos viendo!

Barbara Brave
B

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno tu blog, Barbara! me hiciste reir con tu comparacion a un Ford "sin cataforesis". Yo tambien soy modelo '67 pero ni idea que es eso de la cataforesis...
Rita, Katrina... que hermanitas nefastas!
Me alegra verte bien y disfrutando de tus lindos afectos.
Besos desde BA, Vicky Branca